E aquí mi primer trabajo sobre texturas. Está siendo un tema totalmente desconocido para mí. Durante las últimas sesiones hemos descubierto diferentes maneras de hacer arte con texturas o frottage. Este trabajo consta de dos partes:
Parte 1- Realizar un muestrario con al menos 4 texturas: aguaplast, cascara de huevo machacada, y varios tipos de materias inertes como: esmeril, polvo de mármol, piedra pómez...arena playa o de río
El muestrario puede realizarse sobre un cartón o medra y debe tener cada muestra una superficie de 5x5 cm. Para terminar el ejercicio se pintará sobre la mitad de la superficie dejando una parte con la materia de carga aglutinada y la otra mitad pintada.
Parte 2 Realizar una instalación artística con al menos 4 texturas obtenidas mediante frottage.
Este fue el resultado final
Parte 1
Parte 2




Para la realización de este trabajo me he inspirado en la pérdida de policromía que han ido
sufriendo las antiguas esculturas a lo largo de los años. Es por ello por lo que he decidido hacerles
un pequeño homenaje a mis esculturas favoritas, añadiéndoles un toque divertido. A ojos de
muchos puede parecer una barbaridad puesto que la costumbre y el conformismo han hecho
que no seamos capaces de ver dichas obras con otro tipo de textura o color habitual. No
obstante, todos podríamos reconocer ante qué obra nos encontramos.
Esto me ha llevado a reflexionar mientras realizaba el trabajo, disfrutando con los trazos y
buscando como cuando era niña, frottage por toda mi casa. Podríamos aplicarnos la misma
visión que tenemos de las obras a nosotros mismos, es decir, por qué no empezamos a vernos
tal y cómo somos, valorando cada parte física y personal de nuestro ser, ya que por mucho
exterior que aparentemos, por muchas heridas, texturas o colores que tengamos, nuestra
identidad será la misma, y eso, es lo más valioso que tenemos.
Comentarios
Publicar un comentario